El viaje es relativamente corto. 2 horitas y un poco de avión. y si puedes alójate por el centro. Si lo haces en todo el meollo, quizás no sea lo más apropiado, pero no te vayas muy lejos de forma que puedas ir al centro walking. Es un viaje que recuerdo divertidísimo con mis tías y mi primo
La verdad es que es un viaje que me apetecía, porque tenía ganas de conocer alguna de las ciudades que habían estado dentro del dominio soviético y ver esas casas grises
y feas proletarias tan de tendencia durante la época stalinista. Pero menos una zona a las afueras...de eso nada...todo es bastante bonito. Sobre todo arquitectónicamente. Hay mucho gótico, menos renacentista, mucho barroco y neoclasicismo francés. Tiene hasta partes de arquitectura moderna. Esa de diseño con edificios raros.
Otra cosa que me esperaba, era ver Skodas de los antiguos, pero no. Mucho Skoda pero moderno, un parque automovilístico muy nuevo... incluidos los Mini.
Cuando vas paseando por la calle, todas las caras te parecen familiares, y es que si te pones a pensarlo tanto ellos como ellas son los reyes del porno mundial, así que podrías haber visto a cualquiera en una peli...y es que tienen cara. Gente baste bastante guapa
La ciudad es grande, (alrededor de 1´5 millones) pero bastante manejable. Te hartas a andar y a veces es recomendable coger el autobús (si te enteras de algo en checo) o el metro para volver al hotel. Es muy aconsejable, si no lo tienes incluido en el viaje, contratar un guía el primer día, para que te enseñe un poco la ciudad, te la explique, te diga donde están las cosas, y luego ya a tu rollo.
Hay infinidad de puentes que cruzan el río Moldava, sin poder decir cuál es el más bonito, pero quizás el más famoso y por el que hay que pasar es el de San Carlos que te lleva a la zona de Mala Strana. Una parte preciosa de la ciudad al otro lado del río y que linda con la zona de Hradcany (que leido muy deprisa parace el nombre del anterior disco de Madonna, pero no) donde se encuentra el Castillo de Praga. Para verlo en condiciones necesitas un día entero porque es una fortaleza que tiene dentro de todo: palacios, iglesias, conventos, jardines... Es enorme y prepárate a subir y bajar escaleras.


Yo fui más allá y me adentré una tarde en la zona de Vinohrady. Es un poco la zona de tendencia entre los checos. Muy residencial, tranquilo, pero con mucha cafetería y restaurante de esos que no son turísticos. Muy recomendable investigarla.

El articulo me ha traido muy buenos recuerdos. Praga es una ciudad preciosa y llena de encanto. Una de las cosas que mas me gustaron a parte de la ciudad fue la gente, es muy muy amable. Yo estuve ya hace unos 13 años y tuve la suerte de poder comer y cenar casi cada dia en las terracitas de la iglesia Tyn por poco dinero y de maravilla, habia grupos de jazz amenizando la cena y eran muy buenos. Cualquier espectaculo musical que vimos era estupendo, son unos musicos fantasticos. Lo que menos me gusto de Praga es que estaba hasta la bandera de turistas. Creo que en cada una de mis fotos salen veinte cabezas. Y eso si de bajar y subir cuestas escaleras y patear, me tenia que bañar literalmente en reflex al llegar al hotel. Pero merecio la pena.
ResponderEliminarEfectivamente esta plagado de turistas, por todos lados hasta puntos agobiantes. También es verdad lo de los músicos. Están en todas las calles tocando Jazz. Es un viaje alucinante
EliminarMacho, no me acordaba ya de la pata a la pesebreja...
ResponderEliminarEso es que deja huella... leeselo a la MariCandi
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